martes, 14 de abril de 2015

Aquella fría mañana...




"Quizás recuerdes...aquella mañana fría, de principios de diciembre...
 
El otoño...ya no era otoño...

 
Contemplé tu rostro, que parecía salido de un profundo sueño...
 
El gesto de tu mano...
 
¿Una mano de "el Greco"...?
 
Tu cabellera oscura, que tenía algo de mitológico,
 
puede que...¿Perseo...? ¿Andrómeda...? ¿La Medusa...?
 
O...simplemente...la humedad la había rizado caprichosamente...
 
Creo que era domingo...
 
Recorría esas viejas y disertas calles...,
 
y te encontré...
 
Conmigo hubiera querido llevarte...,
 
acomodarte bajo un edredón,
 
dejar que durmieras un poco más...
 
Y me alejé de allí,
 
no sin cierta pesadumbre en el corazón,
 
no sin cierta sensación de impotencia...
 
¿Me enamoré de ti...?
 
No lo sé...
 
Pero...este domingo...,
 
un domingo pleno de sol,
 
de tibieza primaveral...,
 
contemplé de nuevo el azul que te envolvía...
 
Tus ojos, casi cerrados,
 
la expresión de tu boca...
 
¿Ansiedad...?
 
¿Dolor indefinido...?
 
Y esa mano tuya,
 
con los dedos separados...
 
Delicada...,
 
frágil...
 
Un ademán suplicante...
 
Otra vez me llevé tu imagen...
 
El tiempo había sido piadoso contigo...
 
Apenas algunos rasguños...
 
Y unas manchas de humedad...
 
¡Las lluvias del invierno...!
 
Quizá recuerdes...
 
Yo..., no lo sabré nunca..."
 
 
 
 
 
 
(Archivo: cuevadelcoco.
 
Imagen: mirarlook/cuevadelcoco).

No hay comentarios: