Y es que ya vale de soportar las chapuzas gubernativas del Sr. Rodríguez Zapatero y sus paniaguados.
Pero, claro, el poder es una golosina.
Una deliciosa y atractiva golosona par quienes la han saboreado...
El cargo público, aun a sabiendas de que algún día tendrá que abandonarse, hace que, los políticos, se aferren a él con uñas y dientes.
En este país, la opinión pública no tiene fuerza, ni merece ninguna consideración.
En USA, es el eje de la vida pública.
Presidenciables a un paso del poder, se han visto con la carrera truncada por nimiedades.
Aquí, aun con las historias más sórdidas, un político puede llegar a la cima sin abstáculos...
Pues sí, hacen falta unas elecciones.
Un cambio de aires.
No sé qué sucederá, porque el PP tampoco me merece demasiada confianza, pero, el menos, y, porque no se diga, podrían poner coto a muchos desmanes, y redireccionar de forma positiva cuanto está de capa caída.
No sé..., pero unas elecciones anticipadas, podrían darnos una buena dosis de optimismo, y liberarnos del malestar que nos produce ver cómo el partido en el gobierno, va dando tumbos, y sin un norte preciso hacia el que dirigirse y encaminar el país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario