Pero todo cambia. Ahora, los sectores "progres" de la Iglesia opinan que pensar en la existencia del infierno es una ofensa a Dios. Esto es muy peligroso, peligrosísimo. Se puede ser una mala persona, un bicho de cuidado, haber realizado multitud de maldades, que da lo mismo. Todos descansaremos en la paz del Señor. Lo mismo el santo varón que el genocida, lo mismo el hombre/mujer honrado/a (hay que tener cuidado con estos matices, que ya hasta los semáforos han duplicado el icono en algunos sitios.., ya saben, si ven los informativos...), que el o la canalla más canalla, todos irán o iremos al mismo lugar. O sea, que si a una persona acaudalada le da por legar sus bienes a una ong y a otro individuo se le cruzan los cables y la emprende a tiros con los que tiene más a mano, pues nada..., no pasa nada...
Ya lo creo que es peligroso. !Mucho¡
Que no se enteren en USA, donde hasta los gatos llevan pistola.., quiero decir, arma de fuego.
Pero estoy desbarrando y no era esa mi intención.
Años después, reconocí el genio de Dante. Aunque también me planteé que debía ser una persona muy enferma, para imaginar semejantes torturas.
Pero, ¿dónde está en infierno?
Pues muy sencillo, en este mundo, así de claro.
No trato de descubrir la pólvora, ni mucho menos. Sólo intento que alguien comparta esta forma de ver las cosas.
Dante era un hombre del protorrenacimiento, del siglo XIII, que ya tenían imaginación en aquella época, ya la creo que sí. Y mala uva también.
Porque para dedicarse a mostrar con pelos y señales los horrores que sufren los condenados y todos los caídos en desgracia, se necesita tener uma imaginación calenturienta y con una buena dosis de sadismo.
Claro, que, Dante, era, o fue, un hombre de otra "cultura".
Hoy, a pesar de los pesares, si pudiera echar una ojeada desde los siglos posteriores a nuestros días, se le hubieran puesto los pelos de punta, considerando que su infierno se quedaba corto en dolor. Inquisición, fanatismo, guerras de religión, revoluciones sangrientas, guerras cada vez más "científicas": La Gran Guerra, la Segunda Guerra Mundial, con el intermedio de la Guerra Civil Española, el holocausto, Siberia, la amenaza atómica de la que nunca nos vemos libres, Corea, Vietnam, (antes y después), terrorismo a mansalva y en todas partes, ciego, indiscriminado, buenooooooo...!
¿Dónde está el infierno?
Aquí, entre nosotros, sin más.
Añadamos a esto mafias, cartels, conspiraciones, hambrunas ante las que el mundo permanece impasible, masacres a causa de todo tipo de intolerancias, drogadicción, perversiones sutilísimas y de una crueldad sin medida, y la "Divina Comedia" es un oasis de paz si la comparamos con todo lo anterior.
Los fuegos del infierno...
¿Y esa niña que huye por un camina polvoriento en Vietnam, con el cuerpo quemado por el "napalm", llorando, sin rumbo, si esperanza...?
De pronto, me acuerdo de Orwell y su "1984".
Pues también se ha quedado corto. Igual que Dante.
Y es que la humanidad, triste es reconocerlo, se supera a sí misma, en progresión geométrica para hacer el mal, para causar dolor.
Giovanni Papini, describe a la obra de Dante sin nombrarla: "Viaje de un vivo al mundo de los muertos, como pretexto para hablar mal de los muertos y de los vivos."
Sonriamos, aunque sea amargamente.
(Es domingo, el coco ha salido a dar una vuelta, pero amenaza lluvia.)
domingo, 20 de abril de 2008
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1 comentario:
hoy el coco se ha "levantao" cenizo, venga hombre que no todo son penas en el mundo, que el Zaragoza quizá no baja a segunda. Es broma, las cosas están bastante negras.
de: Pancracio.
PD. haber si este miercoles sales a las 8.
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