Muchas fueron las representaciones
de la Inmaculada Concepción
que realizó Bartolomé Esteban Murillo...
Todavía nos preguntamos
el porqué de esta pasión
por reflejar a la Virgen
"vestida del Sol,
con la Luna bajo sus pies,
y una corona misteriosa de doce estrellas
sobre su cabeza..."
Atributos que la adornan en todas sus pinturas...
Siempre rodeada de ángeles,
y rodeada de una atmósfera
que pretende, según la intención del pintor,
ir más allá de lo puramente terrenal...
Salvo en el gesto,
pleno de humildad y modestia,
Murillo realiza variaciones compositivas
y también ensayos cromáticos...
Esta versión de la "Inmaculada",
conocida como "la Colosal",
parece ser, que, cuando los encargantes
la contemplaron por primera vez,
antes de ser colocada en su lugar definitivo,
no resultó de su agrado.
Pero, una vez instalada
donde debía contemplarse,
causó auténtica admiración.
Y es que, Murillo,
concibió una imagen
pesando en su "efecto teatral",
en la impresión que produciría
desde la altura en que fue situada.
(Archivo: cuevadelcoco).
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