lunes, 28 de febrero de 2011

...una breve visita...


El Filósofo, amigo del Coco, ha hecho una visita a su pequeña ciudad.
Y, con el sol del mediodía, ha recorrido los cuatro kilómetros de la carretera comarcal, antes un camino, que llevan hasta la aldea, a los pies de la montaña...
Le gusta beber agua de la fuente, un agua helada, transparente, limpia, que tiene un sabor especial...
El agua no es insípida...
¡Qué va...!
Una frase ha llegado a su memoria: "...aquel hombre, guardaba en su corazón, el recuerdo de todas las fuentes donde había bebido..."
Sentado junto a la fuente de la aldea, también ha querido hacer su recuento..., sin lograrlo...
¡Qué maravilla...!
Poder recordar todos los manantiales que, en algún momento saciaron su sed...
Ni rostros graves, ni lugares remotos, ni grandes acontecimientos...
Sólo esas humildes aguas, brotando de una roca, o escondidas entre frondas, o en una llanura, en el centro del estío...
El Filósofo, puesto en pie, ha dirigido una mirada al cementerio que está frente a la fuente, con sus altos cipreses que casi ocultan la pequeña iglesia...
Un cementerio recoleto, acariciado por el sol...
"Aquí descansaré algún día..."
Por lo menos, queda el consuelo de saber cuál será el final del trayecto...
Luego, el Filósofo ha regresado a su pequeña ciudad...
Y por fin, ya de vuelta en el llano, ha atravesado la puerta del jardín de su casa...
No soplaba el viento...
Todo estaba en calma...
Y en silencio...

...febrero se despide...

Febrero se va...
Noche de viento
y de estrellas frías...,
...distantes...
Brillan..., ¡tan lejos...!
Febrero se va...,
y un viento desapacible,
acompaña su últimas horas...
¿Hemos vivido febrero...,
o ha sido un sueño...?
Porque ha pasado tan rápido...
El viento, limpia los cielos,
por eso, las estrellas,
brillan tanto esta noche...
Mañana, el inquieto marzo...
¡Ay, cómo pasa el tiempo...!

domingo, 27 de febrero de 2011

...precursores de la primavera...

Hacía frío...
El viento, desapacible, daba un toque agrio a la tarde...
Pero, me he parado a contemplar esta rama florida...
La vida vuelve...
Sí, soplaba el viento...
Algunos pétalos habían caído ya,
sobre la tierra desnuda y parda...
Esta rama, se mostraba dichosa,
dichosa de anunciar el buen tiempo...
La primavera, que todos deseamos...
¿Florecerá también
dentro de nosotros...?

Lo que piensa un ciudadano...y muchísimos más...

"...hace tiempo que no siento la alegría de los domingos...
Cuando era niño, el fin de semana lo veía como un merecido descanso, un intervalo de paz...
Para jugar, para ir al cine por la tarde, para pasear con mi familia...
Y volver el lunes al colegio con renovadas energías...
Y, es que hoy, domingo, me he sentido triste...
Triste, porque me he puesto a pensar...
Ya venía sucediéndome, pero hoy, ha sido más hondo, más intenso, más doloroso...
Casi prefiero el trajín de los días de trabajo..., porque así no pienso...
Mi abuelo, medía el tiempo por las estaciones y por los santos del calendario...
Ya falta poco para la Imaculada...
Quedan dos semanas para la Nochebuena...
Ya alargan los días, se nota que estamos en San Antón...
Se van las nieves, los mediodías son más cálidos y apetece dar una vuelta después de comer...
¡Anda, si es San José...!
¡Pues ya está cerca la Semana Santa...!
Fíjate, han vuelto las golondrinas...
¡Qué calor hace este mes de junio...!
¡Va a ser un verano caluroso...!
Ya se caen los hojas...
Fíjate, estamos en Todos los Santos...
Y así..., sucesivamente...
Y yo, hoy, domingo, me he puesto triste, porque mido el tiempo según se van pagando los plazos de los créditos, según vamos esperando que llegue "el fin de mes", para llenar el bolsillo y ver cómo se vacía antes de lo que esperas... Y, sí, es triste contemplar el paso de los años en función del dinero...
Y no hay otra cosa, ni se habla de nada más...
Esto es grave.
¿No hay nada que no sea el dinero...?
Por lo visto, no.
Y ha sido un día triste...
¡Qué lejos los años infantiles, cuando los domingos eran un tiempo para juegos, amigos y paseos...!
Era dulce sentir el transcurso de las estaciones...
En este domingo, último de febrero, una nube de tristeza ha pasado por mi alma, dejando dentro de mí..., nada más que frío..."

martes, 22 de febrero de 2011

Imágenes de Zaragoza... (7)

Otra imagen del Mercado...
(Nota: Las imágenes pueden ampliarse,
con un "click" sobre las mismas,
para apreciar mejor los detalles).

Imágenes de Zaragoza... (6)

Plaza de la Constitución.
Con muy pocas diferencias...

Imágenes de Zaragoza... (5)

Plaza de la Constitución.
Se aprecia una modernización en los
medios de transporte públicos.
Y el paseo central de la Avenida de la Independencia...,
que permaneció así hasta finales de los años 60...

Imágenes de Zaragoza... (4)

¡Mercado...!

Imágenes de Zaragoza... (3)

Vista de la Lonja y de las Torres de la Basílica de
Nuestra señora del Pilar.
Observamos unas edificaciones, ya inexistentes, que ocultan
la visión de la Plaza, tal como podemos conteplarla hoy.
A la derecha, el edificio que albergó a Radio Popular de Zaragoza,
hasta el otoño de 1988.
La Plaza de la Seo, arbolada...

Imágenes de Zaragoza... (2)

Zaragoza, ayer...
Sin comentarios...

Imágenes de Zaragoza... (1)

Zaragoza, ayer...
Vista de la Plaza de la Constitución
y Calle del Coso.

lunes, 21 de febrero de 2011

Esperando el regreso...


Las ramas, desnudas, cobijan un nido...

Un nido desierto, abandonado...

A veces, el pensamiento,

se asemeja a esos hogares maltratados.

En pleno invierno...

Y una profunda tristeza,

se apodera de nosotros...

Cuando los jóvenes y tímidos brotes

asomen de nuevo,

para sentirse acariciados por el sol,

regresarán los pájaros...

Y reconstruirán, amorosamente,

todo lo que el invierno

se llevó con sus vientos helados...

Mientras, el nido,

como un símbolo de futura vida,

permanece entre las ramas grises...

Impaciencia...

Vuelta a la vida...
Entre dos luces,
o, entre ocaso y sombras,
la vida pugna por resurgir...
Es el eterno ciclo...
También nosotros, todos,
el país entero, lucha, día a día,
por volver a la luz, a la confianza,
a la seguridad, al amparo de un estado,
fuerte y enérgico,
que impulse y haga crecer,
que convierta ilusiones en realidades,
que...,
¡La vida..., eso es lo que queremos...!
La vida...
Es lo que importa...

domingo, 20 de febrero de 2011

"Y la tarde, ya pardea..."

Se va la tarde...
Un momento íntimo, casi mágico...
Hablamos, como si no quisiéramos romper el silencio...
Los charcos reflejan las últimas luces,
que se van desvaneciendo...
Algunos almendros, junto al camino,
muestran su impaciencia...
Los capullos están a punto de abrirse...
Impaciencia...
Impaciencia por volver a la vida, sentirel sol,
el viento, los dulces mediodías...
Se va la tarde...
A lo lejos, luces distantes...
Calma,...
Una brisa, que comienza ya ser fría,
parece sugerirnos el retorno...
"Y la tarde, ya pardea..."

jueves, 17 de febrero de 2011

Epístola a dos pseudopolíticos...

Mis estimados señores: Estamos, según el cálculo que acabo de efectuar, a un mes de la primavera... Y siguen, hasta la saciedad, ocupándose de temas, que, en realidad, deberían dejarse en un último plano, ya que, hay asuntos que importan más al país, o deberían importar...
Que si ustedes han sido unos corruptos, que si ustedes más, que si mire usted qué gente tiene en su partido, pues no digamos la chusma que tiene usted en el suyo...
Y así...
Y no creo que vayan a salir de este círculo vicioso, al que se aferran con uñas y dientes, porque su discurso y sus recursos, se han agotado... Ya no convencen a nadie... Es lo único que tienen y lo único de que disponen para llamar la atención, aparentar que hace algo, y salir en la foto.
El Sr. Rodríguez Zapatero, porque no desea convocar elecciones, y quemará hasta el último cartucho, o, lo que es lo mismo, aguantará el tipo como sea, hasta concluir su legislatura. Y el Sr. Rajoy, porque no tiene la mínima intención de coger al toro por los cuernos, ¡de eso ni hablar...!
Ustedes, deberían estar en un museo, en el Museo de Aberraciones Políticas, Sección Patologías
Incurables, para muestra y ejemplo de lo que es gobernar y oponer sin mojarse los bajos de los pantalones. Eso sí, con ruidos, gritos y alharacas, que suelen llegar, no de ustdes, sino de boca de sus acólitos, que, a fin de cuentas, son unos mandados, y para eso están y cobran...
Se acercan las autonómicas, y ustedes, alma infame de chiquillos malcriados, mantienen esa actitud de gallos de pelea, quiquiriquí por aquí, quiquiriquí por allá..., pero sin mancharse las manos.
Y preveo que pasarán las autonómicas, con resultados ya muy previsibles, y el problema principal, continuará girando sobre el eje de nuestras miserias, seguro que sí.
Y ya saben a qué me refiero: Crisis, desempleo, ineficacia, cobardía, tanto unos como otros..., y alguna bajada de pantalones, como el asunto de la refinanciación de Catalunya, cuyo virus, se ha propagado por todo el país, para que nadie se sintiera a menos...
La señora Merkel, doña Ángela, se habrá acordado de sus antepasados, señor Rodríguez Zapatero, y sus improperios habrán alcanzado a sus difuntos, hasta cinco o seis generaciones atrás...
Pero...¡a usted qué le importa...!
Nada, no le importa nada, le trae sin cuidado lo que diga la canciller...
A riesgo de que nos boten a gorrazos de la UE y volvamos a la peseta, que sería, sin duda, la más pequeña y roñosa desde su aparición como unidad de patria medida de cambio...
¡Ay, señores...!
Son ustedes dignos de figurar en un museo...
Pero ni eso se merecen...
Mejor estarían, metidos ambos dos en una jaula, a cargo de un circo ambulante, como fenómenos de feria, que, bien mirado, lo son... ¡Ya lo creo que lo son!
El uno, por inoperante... El otro, por su patente aburguesamiento político...
Señores...
¿Cambiarán ustedes...?
¿Cambiarán de actitud?
Creo que no...
Y mientras, el sufrido país, pues, eso..., a sufrir...
Como siempre ha sido, y como siempre será, mientras existan individuos como ustedes, y tengan a sus espaldas una buena colección de "ponderadores y ponderadoras", que les doren la píldora, les den la razón, les convenzan de que sus actuaciones son las correctas, y les digan lo apuestos y elegantes que salen en las fotos...
Un mes para la primavera...
Florecerán los almendros, florecerán lo frutales, florecerán los humildes arbustos de los caminos, pero, ¿florecerá el corazón de los españoles...?
Como siempre... ¡quién sabe...!
Mientras tanto, va pasando el tiempo...
Y el día en que los dos, sí, los dos, estén fuera y bien fuera del juego político, es para decirles:
"Señor Rodríguez Zapatero, Señor Rajoy..., ¡que lleven tanta dicha como paz dejan con su ausencia...!

lunes, 14 de febrero de 2011

Sombras...


Todo se torna impreciso, difuso, inquietante...
El Filósofo, ha salido a dar un paseo...
El sol, juega al escondite entre las nubes...
Es una tarde relativamente apacible.
En la llanura, hay amenaza de lluvia.
Los dos perros, enomes, juguetones, se persiguen, hacen amagos de atacarse, corren, vuelven junto a su dueño, y presienten que va a llover.
Miran al cielo, olisquean el aire húmedo...
Están inquietos...
Pero el filósofo no interrumpe su paseo.
Medita...
Medita sobre las horas negras de este sufrido país...
A lo largo de siglos, toda su historia ha sido un contraste de luz y oscuridad.
Aunque, la oscuridad, siempre ha prevalecido...
Pocos momentos brillantes, demasiado pocos, y muy efímeros...
Y ahora, sombras de nuevo.
Este período, se recordará como uno de los más tristes y más sórdidos de nuestra historia, cuando ya hemos consumido una década del siglo XXI.
Un gobierno vacilante, incapaz, indeciso, que cambia de parecer como si fuera una veleta.
Sin autoridad, sin energía, siempre temiendo ser desbancado en las elecciones...
Un gobierno agotado y en caída libre...
Aunque, la oposición también va buena, que bastante castigo tiene con su líder, exento de carisma, anodino, repitiéndose continuamente, que pareceun disco rayado...
Momentos negros, días preñados de oscuridad y oscurantismo...
Un tiempo que recuerda el de hace dos siglos, justamente...
Opresión, radicalización...
Desaciertos en todas las decisiones...
El Filósofo, contempla las oscuras nubes que avanzan por el llaño.
Y dando media vuelta, se dirige a su casa.
A medio camino, comienzan a caer unas finas gotas..
Y ya, desde el ventanal de su estudio, suspira, porque, al fin, llueve de verdad...
Puede que mañana luzca un sol espléndido.
Pero..., ¿quién disipará las otras sombras...?

jueves, 10 de febrero de 2011

El Viajero abandona la cueva del Coco...

Durante varios días, con sus noches correspondientes, el Viajero ha descansado apaciblemente en la confortable cueva del Coco...
Se ha sentado en la entrada, para gozar de algún momento de sol, ese sol engañoso de invierno, pero, a fin de cuentas, agradable...
Las conversaciones se han prolongado hasta la madrugada, observando el crepitar de los leños que arden en la chimenea, y el sueño inquieto, eléctrico casi, de las animales que conviven con el Coco...
Éste, sabía que el Viajero, antes o después, reanudaría su peregrinación por el mundo...
Y así ha sido...
El Filósofo, aprovechando estos días de bondad climática, ha aprovechado para acercarse a la cueva, y escuchar, de labios del Viajero, sus historias y anécdotas de lugares remotos...
Historias, que el Viajero sabe aderezar, para deleite de quienes lo escuchan...
Se han quedado solos, el Coco y el Filósofo, pero, en el ambiente, flota todavía la presencia de ese personaje, que, continuamente, cambia de lugar, huyendo de sus fantasmas...
Su humanidad, su elocuencia, su sabiduría, adquirida a fuerza de tratar con gentes de todos los
lugares imaginables, han sido un regalo, y han constituído un tesoro para guardar en la memoria...
En el lugar más cálido de la memoria...
Ya, en su casa, el Filósofo, se ha acomodado en su sillón de lectura, y ha escrito en su diario...
Ta vez algún día se puedan saber sus reflexiones...
Él, a veces, también quisiera viajar, salir de la llanura, dejar de contemplar el mismo horizonte...
Ser un "homo viator"...
Pero, sigue allí... Y pasan los días, y la luz..., se nota cómo se va alargando, cómo gana espacio a las sombras...
El Gao ciego dormita sobre sus rodillas, ronroneando...
Los dos perros, sobre una manta, cerca del fuego, también duermen... Aunque su finísimo oído está pendiente de cualquier ruido extraño, de cualquier sonido que pudiera significar una amenaza...
A fin de cuentas, ello consideran que esa es su obligación...
Pero, en la llanura, nunca pasa nada...
Sólo el viento, agitando los árboles desnudos...
Algunos, ya se impacientan, y muestran sus prematuros brotes...
Pero, aún queda invierno...
Todavía pueden venir días fríos...
Incluso la nieve puede visitar el llano de nuevo...
Mientras, el Filósofo, lee, pasea, escribe..., y medita...
El Coco, a quien el Viajero ha obsequiado con unos libros maravillosos, también deja pasar las horas...
Todo llega...
Y la primavera llegará para todos...