"El sueño de José".
Mariano Barbasán.
Día 17. 31 de marzo, 2020.
De madrugada, medio en sueños,
he oído llover.
El reloj daba cinco campanadas.
La lluvia seguía cayendo.
...
A las siete,
(...siete campanadas...)
un maullido de Salem.
...
Suelo ver el primer informativo.
Y a lo largo del día,
evito todos los demás.
Quizás, 24 horas,
que tiene la ventaja de poder seguirlo,
quitando el volumen
y leyendo titulares.
...
Hoy ha cesado
toda la actividad no necesaria.
Como si el país estuviera dormido,
lo mismo que "La bella durmiente del bosque".
Cuándo despertaremos...?
Van pasando los días...
...
Marzo se va...
Pues que se vaya...!
Que se pierda entre las sombras,
que se borre su recuerdo
de la memoria de todos!
Para lo que nos ha traído...!
...
Marzo ventoso...
Con muy malos vientos has llegado,
y te vas con vientos peores...
...
A unas horas de abril,
conservo la esperanza
de que las nubes negras se disipen.
Nos vaticinan días duros.
Más todavía...?
...
Hoy, 31 de marzo,
prefiero no mirar atrás.
Demasiado dolor,
angustia e impotencia.
...
Ya es de noche.
Llueve, no para.
Ha nevado más arriba,
pero la lluvia ha deshecho la blancura.
...
Sólo deseo que todo pase.
Que una mañana despertemos,
salgamos a la calle,
y todo, todo,
vuelva a ser como antes...
(Archivo: cuevadelcoco).