Es la vieja táctica...
Pan y circo...
El ya periclitado jefe del ejecutivo, dando tumbos sin orden ni concierto, acaba de mostrar su desesperación, esta vez a costa del erario público y poniendo en peligro a nuestros pensionistas.
Ha tomado la decisión de prolongar el subsidio de desempleo a cuantos lo vienen percibiendo hasta el momento.
No se trata de eso, no...
Si ese capital fuera a parar a las pequeñas y medianas empresas, que son las que generan o pueden generar puestos de trabajo, además de salir a flote y no tener que despedir a sus trabajadores, el país vería cómo se reduce el número de desempleados.
Pero no, puestos a hacerlo mal, hágase mal del todo.
Es una política, si no electoralista, sí, al menos, intencionadamente propagandística y llena de malicia.
Posiblemente, el jefe del ejecutivo, que ve su final muy próximo, quiere agrandar el pozo sin fondo de sus números rojos, para que, quienes le sucedan, lo tengan aún más difícil...
El verano, el dulce verano, pasará como un sueño...
Y el reír será con la llegada del otoño...
No hay comentarios:
Publicar un comentario