A las 23:45 horas del 3 de agosto de 2008, ha muerto en su casa de Moscú, a los 89 años, el escritor ruso, premio Nobel de Literatura en 1970, Alexander Solzhenitsin, a causa de un ataque cardíaco.
Su obra denuncia el horror del régimen soviético, la represión policial, así como la tragedia de los campos de concentración rusos y su inhumano sistema penitenciario en obras como "Un día en la vida de Iván Denisovich", "El primer círculo", "Pabellón de Cancerosos", o "Archipiélago Gulag".
Sus libros me fascinaron desde que leí "El primer círculo", título de referencia dantesca.
Solzhenitsin, opositor al régimen soviético, tuvo que sufrir las consecuencias de luchar por defender la verdad, por mostrar al mundo la negra realidad rusa en toda su crudeza.
La concesión del Premio Nobel de Literatura enfureció a los dirigentes de la extinta Unión Soviética, al tiempo que obtuvo el reconocimiento, merecidísimo, a su indudable valor literario.
Descansa ya, este escritor disidente, con apariencia de monje, que tras largos años de exilio, regresó a la Rusia que tanto amaba, donde fue recibido como un héroe.
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