Inmigración...

Estos años pasados, que, afortunadamente, quedan ya atrás, hemos asistido a la deplorable y erosionada práctica de una política de inmigración..., impuesta por un gobierno sin fuerzas, sólo capaz de sonreír, de contentar, de agradar, pero nunca de actuar consecuentemente...
Los españoles fuimos inmigrantes....
Se nos trató con desprecio, se nos consideró..., iba a decir ciudadanos..., pero ni eso fuimos en el extranjero...,
se nos vio sólo como una masa que aportaba trabajo, como puede hacerlo una máquina... No se tuvo en cuenta nuestra condición de seres humanos...
Y ahora, tenemos el país lleno de inmigrantes, con derecho a protesta, con derecho a residencias "para inmigrantes", que más bien parecen, o son, hoteles de cuatro estrellas, con derecho a subvenciones...
Mientras, hay españoles que lo pasan mal...
Que, para comer, tienen que hurgar en los contenedores póximos a los centros comerciales...
Que duermen en el reducido espacio de los cajeros automáticos...
Que no tienen acceso a la sanidad...
Que, en resumidas cuentas, no viven una existencia digna, sino una supervivencia de parias...
Y eso no...
Se tiene que terminar...
¡Hay demasiados inmigrantes que viven de la sopa boba del estado, improductivos, holgazaneando a sus anchas..., y todo les está permitido...!
Sr. Rajoy, ya sé que lleva cuatro días en el ejercicio de su cargo, pero tiene que comenzar a actuar, debe comenzar a actuar...
Piense en los españoles ante todo...
Los españoles, para usted, deben estar por encima de fasos sentimentalismos, actitudes quijotescas trasnochadas, y, en lugar de hacer recortes a la nación, corte de raíz esa continua sangría, y comience por favorecer al ciudadano...,
Pero al ciudadano español...
Y si sobra algo, entonces..., ya veremos...
No se trata de xenofobia, que es muy fácil aplicar este término, y no siempre es correcto su uso...
Se trata de poner al país en pie...
Pero no a nuestra costa...