lunes, 16 de febrero de 2009

A Chávez le gusta el sillón...


Como a todo político que se precie, a Hugo Chávez le gusta su cargo.
Y hace y está haciendo lo imposible para perpetuarse en él.
El resultado de las votaciones que le permitirán seguir asentando sus presidenciales posaderas en el presidencial sillón le dan ya el suficiente margen para sentirse "presidenciable" durante largo tiempo.
Pero todo huele mal en estas votaciones.
Hay un tufillo sospechoso, algo que no termina de encajar...
Como buen dirigente hispanoamericano, "cumple" con la tradición.
Es decir, una vez logrado el poder, no lo sacan de él ni con tenazas.
La verdad es que el poeta, premio Nobel y también diplomático, Pablo Neruda, ya lo advirtió en su magnífico libro "Confieso que he vivido", allá por el año 75 del siglo pasado.
Neruda dice en su libro, o decía, que todo dictador, tiende a hacerse eterno en el ejercicio de su cargo, que luego, se olvida de las circunstancias que lo han colocado allí, y que por último tiende a emparentar con la nobleza, o familias de prestigio, avergonzándose de su origen humilde.
Chávez, que tiene un perfil de dictador bastante claro, camino lleva...
Y si no, al tiempo...
Claro, que puede llegar el golpista de turno que lo defenestre...
Nadie está a salvo...

No hay comentarios: