Ya en tiempos del ínclito D. Felipe González, causó verdadero estupor el hecho de que un jerifalte de su ejecutivo utilizara un avión de las fuerzas armadas para realizar un desplazamiento, y todo por el hecho de no querer hacer cola en un aeropuerto y tomar un avión de línea, como cualquier hijo de vecino.
Pues bien, parece ser que el gobierno actual, en la persona de sus ministros, han realizado unos MIL QUINIENTOS VIAJES en aviones del ejército desde su llegada al poder en 2004 hasta hoy.
Los secretarios de estado llegan a DOSCIENTOS viajes de la misma forma.
Es decir, haciendo uso de aviones del ejército nuevamente, que parece ser una especie de transporte VIP, muy en boga entre los componentes de ejecutivo.
No nos olvidemos de contabilizar numerosos viajes en helicóptero, que tampoco salen gratis.
Existe un ocultamiento de gastos de desplazamientos, protocolos, y regalos.
Eso sí, el gobierno bien se ha preocupado de hacer públicos los gastos de la etapa de Aznar.
Todo es según el color del partido con que se mira.
O del partido que gobierna.
Que viene a ser lo mismo.
El uso de aviones y helicópteros, pues, amigos míos, lo pagamos todos, es decir, se paga a cargo del gasto público.
¿Cifras?
Los viajes en Airbus cuestan 6000 euros LA HORA.
Los viajes en Falcon 900, cuestan 2000 euros la hora.
Haga cada cual las cuentas si quiere, y ya verá a cuánto asciende el total.
En la época del PP, bien trinaba el PSOE.
Ahora, calla lo suyo y aire lo ajeno.
El ciudadano no se entera, y además, no interesa que se entere.
Esa información se paga en pérdida de votos.
Así que mejor callar.
Y el gobierno, naturalmente, calla.
