miércoles, 22 de junio de 2022

Ray Bradbury: "El vino del estío".

 






Es la primera novela de Ray Bradbury,

al margen de la fantasía científica,

o, como se conoce popularmente,

ciencia ficción.

Un libro feliz,

una historia de verano,

de un verano cualquiera,

pero, que, para su protagonista,

será el mejor

y el más maravilloso de todos.

Con sus zapatos nuevos,

ligeros y flexibles,

se sentirá con alas en los pies,

y capaz de saltar por encima

de vallas y de setos,

de competir con el viento de la mañana

por las sendas

todavía húmedas de rocío.

Como Tom Sawyer

y su inseparable Huck Finn.

Vitalidad e inocencia,

propias de un niño de doce años,

que observa, escucha y descubre,

aspectos insospechados de la vida.

Bradbury, 

ha convertido en poesía 

las jornadas de tres meses estivales.

El futuro no importa.

Sólo la luz,

rotunda, densa, acariciante...
















(Archivo: cuevadelcoco).





martes, 21 de junio de 2022

Balada para el 21 de junio.

 






He dejado ante la puerta del verano

todo aquello que ya no me sirve.

Un recuerdo roto,

otro, remendado,

y alguno más,

manchado por el óxido del tiempo.

Y varias canciones viejas

que me llenaban el alma

de oscura melancolía.

La puerta del verano...

Un buen lugar

donde desprenderse de todo lo inútil.

Y olvidar, olvidar sin miedo...

Incluso los temores arraigados 

desde la lejana infancia.

He dejado más cosas

en la puerta del verano.

No le servirán a nadie...

Y, traspasado el umbral,

me adentro en la luz grata

del primer ocaso.

Quizá el más puro,

el más limpio,

recién estrenado...














(Archivo: cuevadelcoco.

Imagen: mirarlook/cuevadelcoco).







lunes, 20 de junio de 2022

Mañana ya será verano..!







                                                       "Noche de verano".

Edvard Munch.


Ay, los veranos...!

Los dorados veranos de nuestra infancia,

cuando sólo éramos

despreocupados pajarillos,

recorriendo descalzos,

el camino de arena

junto al  riachuelo,

en el que refrescábamos los pies...

A la sombra de los frondosos álamos,

jugábamos a construir casas,

puentes y castillos,

con piedras planas,

ramas y juncos...

Tardes interminables,

que culminaban en espléndidos ocasos...

Ay, dulces y viejos veranos...!

Vuestro recuerdo,

ha iluminado horas sombrías,

plomizas jornadas invernales,

y momentos que sería mejor olvidar...

Mañana, ya será verano...!

Que la luz estival

penetre hasta los más recónditos

lugares de nuestra memoria,

y los libere de todas las sombras...!















(Archivo: cuevadelcoco).




























domingo, 19 de junio de 2022

Acariciando ya el verano...







 

Han pasado los días,

o hemos pasado por ellos...

No importa...

El verano está tan cerca,

que podemos sentirlo

en la yemas de los dedos...

Las amapolas,

han desaparecido...

Y los trigales también...

Es el comienzo de un nuevo ciclo.

Días de calor, 

de muchísimo calor!

Que ha llegado antes de tiempo...

Eso dicen.

El largo camino hacia la luz,

esa senda que parecía interminable,

culmina ya.

La hierba, amarillea y se seca.

Los caminos, se tornan polvorientos.

Y el sol, implacable,

se derrama sobre nosotros.

Llega, sin avisar,

y una vez más,

el esplendor del estío.















(Archivo: cuevadelcoco.

Imagen: mirarlook/cuevadelcoco).